De copas tras la tragedia

Estos días el gran tema informativo en Japón es el hecho de que un grupo de unos cincuenta empleados de JR West se fuera a beber, jugar al golf y a la bolera, tal como tenía previsto, a pesar de conocer la tragedia de Amagasaki, donde los equipos de rescate seguían luchando por recuperar algún superviviente y muchos cuerpos deshechos entre la chatarra. Y todo esto en un país donde se tenía a los ferroviarios por uno de los grupos profesionales más serios. No puedo dejar de tener la sensación de que cada vez cada cual va más a su rollo. ¡Sálvese quien pueda!